PRESENTACIÓN
En los tiempos que corren y con el aumento de pacientes que requieren anticoagulación a largo plazo con antagonistas de la vitamina K, como profesionales sanitarios, estamos en el deber de ofrecerles el mejor tratamiento posible y asegurarles un adecuado control de terapéutico. De igual manera, los pacientes deben adoptar un rol activo en su tratamiento, por lo que es fundamental una educación sanitaria que les ayude a comprender de qué manera pueden contribuir al éxito de dicho tratamiento.
Existen casos en los que, a pesar de cumplir adecuadamente las pautas del tratamiento, el paciente no puede llegar al intervalo objetivo, y es precisamente en estos casos en los que debemos procurar un control más estrecho para garantizar mantener al paciente bien anticoagulado.
Una de las herramientas que nos permite aumentar los controles —y, además, dar mayor independencia y seguridad al paciente— es el autocontrol del tratamiento anticoagulante oral (TAO).
Por todo esto, es fundamental que tengamos claros los conceptos referentes al TAO y que sepamos identificar y formar a aquellos pacientes que se puedan beneficiar de esta modalidad de control.
Milagros A. Suito Alcántara
Hematóloga de la Unidad de Hemostasia y Trombosis.
Hospital Universitario Vall d’Hebron. Barcelona.